Obra realizada sobre una base de madera.
Con diversas materias fui dando la forma del contorno de la caracola. Pasado un tiempo prudencial de secado, la fui modelando poco a poco, formando su caparazón con sus surcos y elevaciones y marcando la entrada al lugar sagrado donde habita el animal. Posteriormente, con colores al oleo, ocres, blanco, negro, azul, amarillo, morado… Revestí su cuerpo para que luciera con todo su esplendor sobre un lecho de arena de mar.
Caracola modelada sobre tablero con diversas materias y acabada en oleo.
|
|